El 28 de abril de 1789, el segundo oficial del Bounty, Christian Fletcher, se amotina y el capitán Bligh es abandonado a su suerte en un bote con 18 de sus hombres.
La historia ha sido inmortalizada en el cine por tres películas. Pero, ninguna de las tres versiones refleja lo que sucedió realmente en aquel motín.
El cine ha desprestigiado la figura del capitán William Bligh, representándolo como un oficial tiránico y ha sobrevalorado la del oficial Christian, mostrándolo como un héroe.
La imagen representada de ambos protagonistas no puede estar más alejada de la realidad, como veremos
La historia oficial
El Bounty zarpa de Spithead el 23 de diciembre en 1787 con 46 hombres. Su misión era recoger en Tahití árboles del pan para trasplantarlos en las colonias inglesas del Caribe y conseguir así un alimento barato para los esclavos.
Este viaje fue iniciado más tarde de lo previsto. El Almirantazgo había retrasado la orden de partida.
La intención del capitán Bligh era navegar hasta Tahití pasando por el Cabo de Hornos en un viaje de 16.000 millas. No obstante, el mal tiempo le impide atravesar el Cabo, a pesar de intentarlo durante un mes.
Frustrado, cambia el rumbo para llegar a través del Cabo de Buena Esperanza, arribando a su destino por el Océano Índico, añadiendo así 10.000 millas más al viaje.
Finalmente, el Bounty llega a la bahía Matavai, Tahití, en octubre de 1788, casi un año después de dejar Inglaterra, con un viaje de 50.000 km en sus velas.
A consecuencia del retraso, Bligh debió quedarse más tiempo de lo previsto en Tahití esperando la estación propicia para el trasplante de las plantas del pan.
Permanecieron 5 meses en la isla.
Durante esos meses, los marineros establecieron relaciones con los nativos y llevaron una vida moralmente relajada que jamás se habrían atrevido a experimentar en las islas británicas.
Finalmente, el 5 de abril de 1789 el Bounty parte de Matavai rumbo al Caribe.
Transportaba 309 plantas del árbol del pan.
La tripulación estaba afligida, habían pasado 5 meses en el paraíso.
Bligh era el único que no había creado vínculo con los nativos y estaba bastante enojado con su tripulación.
Cuando reanudaron viaje, la rabia contenida de Bligh estalla y se vuelve especialmente hacia su segundo, Fletcher Christian.
Esta tensa situación, sumada a “los castigos excesivos” acabarían por desencadenar el motín a 56 km de la isla de Tofua.
Fletcher y 22 hombres obligan a Bligh y a los tripulantes leales a embarcar en un pequeño bote auxiliar del Bounty.
Los abandonan en alta mar con muy pocas provisiones.
Cuatro hombres leales a Bligh tuvieron que quedarse en el Bounty por falta de espacio en el bote
.
Las causas de la Rebeldía
Las versiones cinematográficas muestran la causa del motín en la tiranía del capitán.
Pero, el verdadero Bligh era discípulo del capitán Cook e igual que su maestro, se preocupaba por la dieta de la tripulación e incluso de su condición física
Antes de zarpar de Inglaterra contrató a un violinista para que a sus hombres no les faltara ejercicio y diversión.
Además, Bligh no era partidario de aplicar castigos corporales.
Antes de iniciar el viaje, había comentado que intentaría hacer la travesía sin castigar a ninguno de sus hombres, objetivo que finalmente no pudo conseguir. Pasadas 10 semanas de navegación administra los primeros azotes para mantener la disciplina.
No obstante, nunca se excedió y aún, cuando la ley le permitía colgar a los tres marineros que habían intentado desertar en Tahití, el castigo que les infringió fueron los azotes.
Cierto es, que existieron enfrentamientos entre Bligh y Christian antes del motín. En alguna ocasión, Bligh acusó a sus oficiales, entre ellos Christian, de haberle robado unos cocos que tenía en la cubierta del barco.
Bligh subestimó los efectos de estos desacuerdos en los oficiales y la tripulación. El Capitán los olvidaba pronto e intentaba retomar las relaciones.
Sin embargo, ninguno de estos hechos justifica plenamente la revuelta de la tripulación. La verdadera causa del motín fue la larga estancia de los marineros en Tahití.
Durante cinco meses vivieron como reyes, especialmente Christian, que estaba a cargo de la partida de tierra y pudo vivir con relativa independencia de su superior.
Allí había amigos tahitianos que adoraban a los marineros, la vida era fácil y las mujeres bellas y accesibles. Muchos de los tripulantes se aparejaron con muchachas de la isla. Fletcher Christian lo hizo con una indígena que se llamaba Maimiti
Durante casi medio año los tripulantes se olvidaron de la estricta disciplina de abordo y el regreso al Bounty fue muy duro y muchos no lo pudieron soportar.
Los protagonistas
Fletcher y Bligh, héroe y villano, se conocían muy bien antes del viaje. Christian había navegado a las órdenes del Bligh en dos ocasiones e incluso conocía personalmente a su familia.
Estos hombres eran muy diferentes y venían de familias muy distintas.
Bligh nace siendo “un caballero” sin fortuna. De muy niño entra en la Marina y sabe que debe trabajar durante el resto de su vida para ganarse el pan.
Era ansioso, puntilloso y quejoso con sus finanzas. Se mostraba austero y registraba todos sus gastos.
Fletcher Christian, en cambio, había nacido en una familia famosa por sus bancarrotas, gracias a su apellido, los Christian sostenían una lujosa vida, tuvieran o no el dinero.
El padre de Christian murió cuando él todavía era niño, dejando numerosas deudas. Éstas pronto se incrementaron debido al gasto desenfrenado de su hermano mayor, John, y su madre, Ann.
Las deudas siguieron creciendo y la imposibilidad de pagarlas obligó a la familia a huir a la isla de Man, entre Inglaterra e Irlanda, para evitar la cárcel.
Muchos años después de la rebelión, uno de los amotinados sugirió que la causa del enfrentamiento entre Bligh y Christian en el Bounty fue que Bligh le había prestado dinero a Fletcher en el viaje de ida, en Ciudad del Cabo, y el capitán siempre se lo recordaba.
Heroísmo con autoridad vs. canalladas en libertad
Después del motín, a pesar de las condiciones adversas, Bligh y sus hombres llegan el 14 de junio de 1789 a Timor, luego de cuarenta y ocho días de una navegación más que precaria.
Habían navegado unas 3.600 millas y fue esta travesía una de las más famosas de la historia naval.
Bligh sólo perdió un hombre que fue asesinado por los indígenas de una isla donde Bligh y su tripulación se refugiaron en busca de alimentos.
Mientras tanto, el Bounty navega de vuelta hacia Tahití, en el camino desembarcan en varias islas de la Polinesia.
Vagan, de archipiélago en archipiélago cometiendo toda clase de saqueos y violencias contra los indígenas. Dos amotinados mueren en estas luchas.
El 29 de junio comienzan a buscar alguna isla que estuviera alejada del tránsito habitual de los barcos y que fuera suficientemente fértil para alimentarlos.
Sin éxito y cansados de buscar deciden volver a Tahití. Al llegar, más de la mitad de la tripulación baja inmediatamente a tierra.
Esa misma tarde, Christian y ocho amotinados más, levan anclas y desaparecen antes que sus compañeros pudieran sospecharan el abandono.
Zarpan de Tahití, 9 amotinados, seis hombres y once mujeres indígenas, que en su mayoría habían sido engañados y secuestrados.
Pitcairn: del paraíso al infierno
El 15 de enero de 1790 terminan, finalmente, refugiándose en la isla de Pitcairn.
Aquella isla tenía buenas tierras para cultivar y, además, su posición no estaba bien señalada en las cartas. Era el escondite ideal.
Allí, vaciaron el barco y luego lo quemaron para evitar ser descubiertos.
Pero, las dificultades no tardaron en llegar.
Las sangrientas peleas entre tahitianos e ingleses eran cotidianas.
Christian y sus hombres trataban a los tahitianos como esclavos y ambos grupos se disputaban las mujeres.
Finalmente, los indígenas se revelaron y comenzaron los asesinatos. Fletcher Christian fue una de las primeras víctimas. Muere acuchillado por uno de los indígenas secuestrado.
La caja de pandora
En Inglaterra, luego de que Bligh informa el motín, las autoridades envían un barco, el Pandora, a capturarlos.
La nave llega a Tahití en marzo de 1791 y consigue capturar a los rebeldes que allí quedaban. Dos de ellos ya habían muerto.
El capitán del Pandora, Edwards, era todo lo contrario de Bligh, no tenía escrúpulos con sus hombres y menos aún con los capturados del Bounty.
Encarceló a los 14 amotinados en una prisión de madera a la que llamaron la “Caja de Pandora”.
Ni siquiera tuvo consideración por los 4 leales que Bligh había excluido de la participación en el motín. Todos fueron encadenados y encerrados en unas condiciones infrahumanas.
Edwards y sus hombres buscaron por las islas al grupo de Christian, pero no los encontraron.
De vuelta a Inglaterra, el 29 de agosto de 1791, el Pandora encalla en unos arrecifes cerca de Australia y naufraga.
Cuatro de los amotinados mueren ahogados junto a otros treinta miembros de la tripulación.
Los sobrevivientes consiguen llegar a Timor en los botes de salvamento del buque.
Después de muchas vicisitudes, los amotinados llegan con el capitán Edwards, a Spithead, Inglaterra, el 19 de junio de 1792.
La Justicia de reojo
El juicio se celebra entre el 12 y el 18 de setiembre de 1792.
De los diez marineros juzgados, seis fueron condenados a muerte y cuatro fueron absueltos. Estos últimos eran los que Bligh había exonerado de toda culpa.
El tribunal solicitó el indulto al Rey para dos de los condenados. La posición social de estos influyó y obtuvieron el perdón real.
Uno de los otros cuatro condenados presentó alegatos en su favor y la condena quedó en suspenso. El 11 de febrero de 1793 también recibió el indultó del Rey.
Para ese entonces, los otros tres ya habían sido ejecutados el 29 de octubre de 1792.
Bligh vuelve por el pan
En 1792, Bligh como capitán del Providence vuelve a Tahití en busca del árbol del pan.
Llega en abril de ese año y consigue llevarse más de 2000 frutos del árbol del pan.
Este hecho fue tan importante que hasta figura en el epitafio de su tumba.
Pitcairn: Del Infierno al paraíso
Los habitantes de Pitcairn fueron descubiertos recién en 1808 por el barco americano Topaz que los encontró casualmente.
Vivían allí 35 personas, básicamente las viudas de los amotinados y su descendencia. Uno de estos era Jueves Octubre Christian, hijo de Fletcher Christian y de Maimiti.
El único sobreviviente del motín, John Adams, explicó su versión:
Una vez se acabaron las venganzas sólo quedaron dos amotinados con vida, el propio, John Adams y Edward Young, quien murió de asma en 1800. Todos los Tahitianos habían sido asesinados.
John Adams vivía acompañado por varias mujeres y 20 niños. Tenía 36 años y después de haber visto la naturaleza humana bajo sus más tristes instintos, reflexiona y modifica drásticamente su carácter.
Decidido a enmendar el pasado, encuentra una biblia rescatada del Bounty y comienza a predicar en la comunidad. Les inculcar principios y valores a los jóvenes que lo consideran un padre.
Adams, se transforma en el legislador, en el sacerdote y en el rey de Pitcairn. Gobierna la pequeña colonia hasta su muerte en 1829, cuando tenía 66 años.
De la realidad a la leyenda
Si esta es la historia, ¿Porqué Bligh se convierte en un oficial sin escrúpulos y Christian en un héroe?
Entre los amotinados capturados en Tahití había un joven oficial, Peter Heywood, que estaba lejanamente emparentado con Christian.
Ese joven resultó además ser pariente de, Lord Richard Howe, antiguo Primer Lord del Almirantazgo.
De los 12 capitanes que se sentaron como jueces en la corte marcial, uno era el tío de Peter; otro era “el amigo especial” de otro tío, también almirante; y otros dos debían su carrera a Lord Howe.
Evidentemente, el joven Peter fue declarado culpable, pero se solicitó el perdón del rey y fue absuelto.
Una vez obtenido el perdón, la familia de Peter necesitaba limpiar su imagen para que pudiera continuar en la Marina.
En este punto, uno de los hermanos de Christian se une a los esfuerzos de la familia Heywood para limpiar también su apellido.
Y así fue como los abogados inteligentemente manipularon y confundieron la historia desprestigiando al capitán Bligh.
Cuando Bligh vuelve de su segundo viaje en busca del árbol del pan, descubre que, había marchado como héroe, pero ahora, era el villano.
Afortunadamente, ha sobrevivido una extraordinaria cantidad de material relacionado con esta maravillosa, interminablemente y fascinante historia de la caza del hombre por el hombre.
Y, desde cualquier perspectiva, la realidad es mucho más sorprendente que cualquiera de las historias que ha contado el cine.
Lic. Florencia Cattaneo
Campo Embarcaciones
Bróker Náutico
Fuentes:
Pág. web naucher.es; El motín de la Bounty, Realidad, Ficción Y Cine
Julio Verne; Los Amotinados del Bounty
Pág. Wikipedia; Motín del HMS Bounty
William Bligh; La verdadera historia del motín de la Bounty
Caroline Alexander; La Bounty
Monsieur de Villefort; El motín de la Bounty: Entre la Historia y la Leyenda
Caroline Alexander; La verdad sobre el Motín del Bounty